Euphorbia resinífera
Tienes que ver como florece por completo, una planta muy hermosa en épocas de floración, pero su a vez muy común cuando no lo esta.
Su Origen
El cardón resinoso o Euphorbia resinífera pero también recibiendo más nombres como Cardón de Marrakech, Euforbia resinífera, es originaria del Reino de Marruecos que está distribuida entre las partes más bajas y secas de las montañas del mediterráneo que van desde el Atlas Medio de la parte suroccidental hasta el Macizo del Kest conocido como el Anti-Atlas occidental y pertenece a la Familia: Euphorbiaceae (Euforbiáceas).
Características
Estas plantas son de un crecimiento lento pueden extenderse creando grandes colonias de 50 centímetros de alto por hasta más de 15 metros de diámetro.
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Sus tallos ramificado van desde la base de forma erecta, con un color verde gris y con 4 aristas con espinas, de costados estriados cuando la planta es joven pero después llegan a ser planos, sus costillas son ligeramente dentadas, con espinas de entre 5 y 6 mm de longitud, en grupos de dos, con una separación de 5 a 10 mm entre cada par.
Las flores de Euphorbia resinífera nacen en inflorescencias, que se sitúan entre los pares de espinas de cada ángulo, estas están formadas por tres ciatios amarillos en su totalidad: dos de los laterales, están pedunculados y son hermafroditas, que se desarrollan y caen luego del central, que es masculino.
El fruto de esta planta es una especie de cápsula con forma similar a un globo, con un tamaño pequeño, y un pedicelo corto de 4 a 8 mm con unas cocas bien diferenciadas, cada una de los cuales tiene su propia semilla, que es grisácea o amarillenta, recubierta por unas finas placas.
Como cultivarla:
Puede crecer tanto en macetas como en zonas con un clima suave o caluroso, pero incluso pueden crecer en interiores. Se desarrollan mejor en un sustrato bien drenado, aunque no son muy exigentes con el suelo.
Los riegos de Euphorbia resinífera pueden ser moderados ya que se trata de una planta suculenta que no requiere mucha agua, y casi suspenderlos en los inviernos.
Cuando están vigorosas, estas plantas son tolerantes al frío.
En su reproducción se amontonan y se ramifican para extenderse es una planta ampliamente adaptable, capaces de resistir también el pleno sol que les ayuda a mantener su forma de crecimiento compacto, pero diferentes brotes varían con su tolerancia al sol.
Se multiplica por esquejes que se deben dejar secar durante una semana antes de plantarlos y estar precavidos de evitar el contacto con su látex irritante y toxico.