SOMOS LA WIKIPEDIA DE LOS CACTUS Y SUCULENTAS, MAS DE 200 MIL ESPECIES.
Las suculentas no toleran suelos húmedos porque sus raíces son sensibles a las bacterias que proliferan con la humedad. Por lo tanto, al cuidar suculentas en un terrario, es importante tener en cuenta la luz y el agua.
Cantidad adecuada de luz
Las suculentas requieren mucha luz, pero es importante saber cuánta es suficiente. Las plantas te darán señales si necesitan más o menos luz.
Poca luz: Las plantas crecerán altas o se inclinarán hacia un lado en busca de luz. Este fenómeno se conoce como «estiramiento» o etiolación, y no daña la planta. Sin embargo, la falta de luz puede hacer que las plantas se vuelvan pálidas y pierdan su color.
Si esto ocurre, debes mover tu planta a un lugar más iluminado. Si tus suculentas no han estado expuestas al sol directo, evita exponerlas de repente a largos períodos de luz solar directa, ya que pueden quemarse. La luz solar directa requiere una adaptación gradual, comenzando con una o dos horas diarias y aumentando gradualmente. Si vives en una zona con poca luz natural, puedes utilizar luces de cultivo para proporcionar luz artificial a tus suculentas, pero recuerda mantener la fuente de luz a una distancia máxima de 30 cm.
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Demasiada luz: Es posible darle demasiada luz a tus suculentas, especialmente cuando son jóvenes. La mayoría de las suculentas pequeñas se quemarán si se exponen a la luz solar directa y caliente durante mucho tiempo. Las hojas pueden presentar quemaduras irregulares o comenzar a secarse desde el borde hacia el centro. Además, la luz solar puede magnificarse a través del cristal del terrario, convirtiéndose en un haz intenso y caliente. Por lo tanto, evita la exposición directa al sol.
Si algunas hojas de tus suculentas se queman, no te preocupes. Las plantas desarrollarán nuevas hojas y las viejas caerán. Simplemente aleja el terrario de la zona demasiado iluminada y evita regarlas en exceso. También puedes cubrir el terrario con una tela fina, una bolsa de plástico o una toalla de papel durante las horas soleadas del día, pero asegúrate de que haya suficiente circulación de aire.
Cantidad adecuada de agua
La cantidad «perfecta» de agua para las suculentas puede variar, pero es mejor seguir la regla de «más agua, menos frecuencia». En general, debes regar abundantemente la tierra y esperar a que se seque antes de volver a regar. Las suculentas necesitan un suelo que se drene rápidamente, por lo que si viertes agua en un punto específico, simplemente se filtrará al fondo sin alcanzar el resto del terrario. Esto no es beneficioso, ya que los terrarios no tienen drenaje.
Por ello, se recomienda regar el terrario de suculentas con un flujo de agua suave y distribuido en una amplia área. Recuerda evitar el exceso de riego y no regar con demasiada frecuencia. Ten en cuenta que los cambios no ocurren de la noche a la mañana, como en otras plantas de interior.
A continuación, te indicamos cómo identificar cuando tus suculentas te están comunicando algo.
Poca agua: Las plantas se ven arrugadas o las hojas se marchitan hacia abajo.
No riegues en exceso. Las suculentas pueden tolerar períodos prolongados sin agua, ya que están adaptadas a vivir en climas desérticos. Si tus suculentas están en un terrario sin drenaje, ten cuidado con la cantidad de agua que les das. Observa las plantas durante la próxima semana y verás que se vuelven más turgentes nuevamente. Evita añadir mucha agua de una vez, ya que esto puede pudrir las raíces y causar la muerte de las suculentas.
Demasiada agua: Este es un error común al cuidar suculentas. Cuando las plantas reciben demasiada agua, las hojas inferiores mueren o se pudren, volviéndose blandas y desagradables al tacto.
En la mayoría de los casos, debes dejar que el terrario repose sin regar hasta que la tierra esté completamente seca. Puedes verificar si la tierra está seca observando su color, que se vuelve claro y polvoriento. También puedes introducir un dedo, un palillo o un medidor de humedad en la tierra para comprobar su nivel de humedad. Si has añadido demasiada agua al terrario y la tierra está empapada, o si ves agua acumulada en el fondo del recipiente, es posible que debas tomar medidas más drásticas. Puedes utilizar una jeringa grande con una aguja larga, como las utilizadas para rellenar cartuchos de tinta, para extraer la mayor cantidad de agua posible del fondo del recipiente. Luego, coloca el terrario en un lugar luminoso con buena circulación de aire, pero sin exposición directa al sol, y déjalo secar por completo. Después de que se haya secado, puedes volver a regar tus plantas. A veces, algunas partes de las plantas pueden morir, pero eso no significa que toda la planta esté muerta. Con amor y paciencia, volverán a crecer.
Fuente: jugosokits.com
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